Amazon Glacier es el nombre que recibe el nuevo servicio de almacenamiento en la nube de Amazon, un servicio que nace con la intención de abaratar los costes que este tipo de almacenamiento puede suponer para las empresas. Se trata, por tanto, de un servicio de almacenamiento de bajo coste. O como dicen sus responsables: de coste extremadamente bajo.
0,01 dólares es el precio que Amazon Glacier cobra de forma mensual por cada Gigabyte almacenado. La primera ventaja salta a la vista: en Amazon Glacier no hay que pagar nada por adelantado. Normalmente los servicios de almacenamiento ofrecen una serie de planes, cada uno de ellos con su correspondiente tarifa fija (anual o mensual) en función de la capacidad de almacenamiento. En Amazon Glacier se paga por el espacio usado, ni más, ni menos.
Lo más interesante de todo es que no hay mínimos ni máximos en cuanto a la cantidad total de datos almacenados: disponemos de todo el espacio que necesitemos para alojar teras y teras de información si así lo deseamos. Eso sí, el tamaño máximo por archivo es de 40 TB.
¿Cuál es el truco? Amazon Glacier está pensado para trabajar como sistema de almacenamiento de datos a los que se accede con poca frecuencia, ya que los tiempos de recuperación pueden ser de varias horas. Es como si los metiéramos en un congelador con la intención de tenerlos ahí años y años. La idea es disponer de un sitio seguro y duradero en el que guardar grandes cantidades de datos como copias de seguridad, en ningún caso para trabajar constantemente con ellos.
Vía | Techcrunch
Sitio oficial | Amazon Glacier
Fotografía | Jay Galvin