La CEO de Mercadona online afirma que “la web era una mierda” y hacía que perdieran “mucho dinero”: así lo están solucionando

Ya en el año 2017, Juan Roig, presidente de Mercadona dijo públicamente que la web de estos supermercado era una "mierda" y que se planeaban grandes cambios a partir de 2018. Hubo cambios, pero no los suficientes. En 2023, Juana Roig, su hija, y la CEO de Mercadona Online ha confirmado que "la web era una mierda y esto era un problema". Y, con esto, ha desvelado los planes en los que trabaja este gigante español.

En un podcast online de Itnig, Roig ha confesado que "Mercadona estaba perdiendo mucho dinero con su web vieja y su antiguo sistema de ventas. ¿Para qué seguir con algo con lo que perdemos dinero?".

Hay aquí un dato muy importante: Mercadona es la empresa que más factura de España (según información ofrecida por Itnig delante de la propia Roig, Mercadona se lleva un tercio de todas las ventas de alimentación en España), pero Mercadona online solo es el 3% de las ventas totales de la firma. Roig quiere que pronto sea el 5%.  A pesar de los cambios, a Mercadona le compensa mucho más la tienda física, económicamente hablando, ha dicho la ejecutiva.

En qué estaba fallando Mercadona

Uno de los grandes problemas que encuentra Mercadona para casar su sistema de ventas online y sus tiendas físicas es conseguir reponer todo a tiempo. Hasta hace poco, "las tiendas no podían asumir los pedidos online sin interrumpir toda la labor de atender bien a  los clientes en tienda".

¿Qué se ha hecho para poner remedio a esto?. En las grandes ciudades, la tienda que tú conoces, cuenta con otra  totalmente paralela que hace las mismas funciones pero para llevar pedidos a casa. Lo que la empresa llama las colmenas: almacenes de 10.000 metros cuadrados donde tienes lo mismo que encuentras en una tienda (incluso al jamonista), con las mismas secciones, personal de plantilla, pero no hay clientes.

Estas colmenas salen rentables: "ganamos 6 euros por pedido". Obviamente, "las colmenas más rentables son las más grandes, Madrid y Barcelona, y  después Valencia. Se espera llevar este modelo a lugares como Alicante, Málaga y Sevilla.

Donde tengas un Mercadona relativamente cerca (media hora, 40 minutos...) vas a tener un servicio online. Roig no da datos exactos sobre cómo decidir qué calle sí puede pedir online y cuál no, solo da esas estimaciones. Y es que, en el caso de ciudades más pequeñas y regiones con poca gente sí que conviven el jefe físico y online en una misma tienda.

Pero es difícil: "imagínate que a primera hora de la mañana se preparan 100 pedidos, a pesar de eso hay que conseguir que a las 9, cuando se abra la tienda, todos los huecos de todos los alimentos que se han recogido estén repuestos".

La facturación del área online en 2022 fue de 540  millones de euros. Entre sus planes está el nuevo modelo, que comprenderá una web más avanzada, para que esté totalmente listo en 2025. Además, según  explica Roig, la marca planea un proyecto de automatización de las  colmenas que podría empezar en Barcelona. Pero esto solo si lo llegan a ver rentable.

La CEO del online también ha hablado de un tema importante. ¿Quién sucederá a su padre? Ella afirma que "tiene más sentido que el sucesor sea un ejecutivo que de la familia".

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