La Unión Europea avanza hacia su criptomoneda propia, un euro digital, a pesar de que se prevén ciertos riesgos

La Comisión Europea sigue trabajando en la idea de una regulación de un euro digital que llegue para principios de 2023, aunque este año debería comenzar el desarrollo del primero prototipo de esta criptomoneda. El Banco Central Europeo considera importante que la Eurozona tenga una criptomoneda propia. Hasta 2025 no es la fecha indicada para que llegue al mercado. En Estados Unidos las autoridades también trabajan en tener su propia moneda del estilo.

Christine Lagarde, directora del Banco Central Europeo anunciaba en julio de 2021 que 80 bancos centrales estaban interesados en la creación de monedas virtuales. Ahora la Comisión Europea prepara la legislación que afectará al euro digital. Si se cumplen los planes, esta regulación estará lista para comienzos de 2023 para comenzar a trabajar en el prototipo a finales de ese mismo año. La legislación tendrá que gestionarse con todos los estados miembros de la Unión Europea.

Dudas de si podría desestabilizar el sistema financiero europeo

Se espera que la UE inicie un proceso de consulta pública muy pronto. Hay bastantes dudas que se van a tocar en esta consulta pública como ver si los ciudadanos europeos utilizarían el euro digital. Mairead McGuinness, director financiero de la UE, anunció esos planes la pasada semana, aunque no hay información más concreta de cómo se hará.

También habrá una asesoría sobre el impacto que este euro digital podría tener en una potencial desestabilización del sistema financiero. Los bancos, por ejemplo, temen que los ahorradores puedan convertir sus depósitos en la moneda digital respaldada por el banco central con sólo pulsar un botón si se produce otra crisis financiera, lo que tendría consecuencias financieras.

Aunque es el Consejo de Gobierno del BCE el que tiene la última palabra sobre la necesidad de un euro digital, los responsables políticos de la Comisión y de toda Europa se muestran convencidos según Politico.

Alemania y Francia instaron el año pasado al BCE a acelerar el proceso ante el temor de que la eurozona se quede atrás. Hay que recordar que el Banco Popular de China inició su camino hacia un yuan digital en 2014. El Ministerio de Finanzas de la India, por su parte, se ha comprometido a tener una versión virtual de la rupia a finales de este año.

El presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe, también ha incluido el euro digital en su agenda política para que lo discutan los ministros de finanzas.