Si eres de los que habitualmente cuelga fotos de sus hijos (sobrinos y similares) en Facebook, cuidado, porque una joven acaba de demandar a sus padres por hacer precisamente esto. Así y en unas semanas en las que la plataforma se ha visto inmersa en una tremenda polémica por censurar la fotografía de la niña del napalm, la acción de esta chica de 18 años ha vuelto a abrir el debate.
Un asunto que viene planteándose durante el último año y que cobró especial relevancia durante el mes de mayo, cuando las autoridades francesas empezaron a advertir de la posibilidad de que los menores pudieran denunciar a sus padres por divulgar sus imágenes en redes sociales sin su permiso. Pero vayamos con el caso que nos ocupa y analicemos la situación.
La nueva demanda
Así, la protagonista de la nueva demanda es una chica de 18 años de edad procedente de Carintia, Austria. Una mujer que ha denunciado a sus padres por haber hecho públicas en la red de Zuckerberg imágenes que considera abochornantes y que corresponden a su infancia. “No les importaba si se trataba de una imagen de mí sentada en el inodoro o desnuda en la cama […] cada etapa de mi vida fue fotografiada y publicada”, ha comentado la afectada.
Evidentemente y antes de iniciar el procedimiento, cabe comentar que la joven solicitó de forma reiterada a sus progenitores que eliminasen hasta 500 fotografías. Ante su negativa, decidió emprender acciones legales. “Estoy cansada de que no me tomen en serio”, ha afirmado.
Para conseguir acabar con ellas, su abogado, Michael Rami, asimismo, esgrimirá que violan su derecho a la privacidad. Una conclusión para la que todavía cabrá esperar y sobre la que no existen precedentes en este país. De momento, el padre de la chica apunta que tiene el derecho de hacerlas públicas porque fue él quien las llevó a cabo. Algo tremendamente cuestionable y una conclusión para la que no se necesita ser experto en la materia.
Otros precedentes
Sin embargo y como comentábamos, la cuestión planteada en la recién impuesta demanda no es única, sino que la policía francesa ha llegado a publicar en su página oficial de Facebook una advertencia que recomienda a los padres que no suban fotos de sus hijos a Internet. Meses antes, el citado estado comenzó a alertarles también de esta posible demanda que, de hecho, podía alcanzar multas de hasta 45 mil euros y un año de cárcel.
En definitiva una realidad y unos casos que nos dan que pensar y para cuyo análisis no podemos dejar de mencionar un estudio realizado por la Universidad de Michigan y la de Washington en la que se recogía que a los niños no les hace ninguna gracia que se compartan fotos suyas en redes sociales sin su permiso.
La investigación, incluso, llegaba a recoger qué normas referidas a la tecnología les gustaría que siguiesen sus padres. Una lista que puedes consulta de manera más detallada aquí y una cuestión bastante inquietante, en especial si valoramos que hasta el 17% de estos progenitores jamás se ha molestado en cambiar su configuración de privacidad.
Tampoco debemos perder de vista otro estudio anterior, el publicado por la compañía Nominet y que puso de manifiesto que, solo en el Reino Unido, los padres publicaban cerca de 200 fotografías al año de menores de cinco años, lo que significaba que cada uno de estos niños tendrá alrededor de mil fotos online antes de alcanzar la citada edad.
Un asunto tremendamente controvertido en el que entran en jaque diversas cuestiones y en que tampoco podemos dejar de valorar, al margen de las implicaciones psicológicas y sociales que pudieran derivarse en un futuro, el hecho de que estas imágenes caigan en manos de pedófilos o similares.
Imágenes | Pixabay
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