Microsoft va lanzando con cierta frecuencia actualizaciones para su sistema operativo estrella: Windows 11. Si bien, aunque siempre recomendamos actualizar a las últimas versiones que se han lanzado por la resolución de diferentes agujeros de seguridad, la realidad es que estas actualizaciones pueden traer más quebraderos de cabeza que soluciones.
Esto es lo que ha ocurrido con la actualización opcional que se lanzó la semana pasada. Tal y como ha recogido Windows Latest, la versión de Windows 11 KB5043145 está generando entre todos los usuarios problemas de pantallazos azul o pantalla de la muerte que deja al ordenador prácticamente sin posibilidad de ser usado.
Una actualización de Windows que mejor dejar en el tintero
El hecho de que aparezca la pantalla azul a la hora de usar el propio ordenador tras actualizar ha sido reconocido como un problema conocido por parte de Microsoft y que afecta a las versiones 23H2 y 22H2 de Windows 11. A partir de ese momento, Microsoft ha eliminado en teoría la posibilidad de actualizar.
El problema que se genera con esta actualización radica en un bucle de arranque que se inicia al momento de querer ejecutar los archivos de Windows. En ese momento, cuando se inicia el bucle, el sistema se bloquea mostrando la pantalla azul de la muerte.
"Después de instalar KB5043145 y reiniciar, mi portátil se queda en la pantalla del logotipo del fabricante del portátil con un círculo girando durante 20 minutos. Tuve que presionar "Encendido" y Windows 11 comenzó su recuperación". Este es el relato de uno de los usuarios afectados por este problema tras hacer la correspondiente actualización.
Microsoft es conocedora de todos estos problemas. Los usuarios apuntan a que en el momento de detectar este fallo los usuarios tras pulsar en BSOD se arranca el sistema de reparación automática para desinstalar la actualización. Si bien, algunos usuarios afirman que sus equipos no llegan a sufrir problemas de bloqueo, pero que sí dejan de funcionar sus periféricos como los ratones o los teclados porque afecta al funcionamiento de los puertos USB.
Para evitar estos problemas es importante que no se haga la instalación de la actualización. Pese a haber sido retirada, es posible que te la encuentres ya descargada y lista para instalar. Igualmente, también vas a poder desinstalar la actualización de manera manual a través de las opciones de recuperación de Windows en el caso de que estés notando algo raro. Para poder actualizar habrá que esperar hasta que salga un nuevo parche.
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