Las autoridades de los Estados Unidos han pasado al ataque, dispuestos a amargar las fiestas de Kim Dotcom. El Departamento de Justicia de este país ha presentado un informe de 191 páginas con pruebas que pondrían al creador de Megaupload en un aprieto: correos, enlaces, archivos, conversaciones en Skype... todo tipo de información para indicar lo que pasaba dentro de los servidores del servicio que puso patas arriba las leyes de copyright.
El objetivo es claro: demostrar que Megaupload tenía una agenda oculta detrás de su fachada de "servicio para compartir archivos de gran tamaño", moviendo grandes cantidades de dinero para beneficiar a aquellos que aportaban tráfico al servicio independientemente de si usaban archivos legales o pirateados.
Como no son pocas, resumamos todas las acusaciones y acciones de la justicia de los Estados Unidos en una lista para hacerlo más fácil:
A pesar de haber impedido las búsquedas internas de ficheros en el servicio, Megaupload vigilaba el tráfico de su web proveniente de portales de enlaces piratas con los que tenía publicidad y premiaba económicamente a los que subían más ficheros. Algunos correos muestran las negociaciones de esas recompensas, que empezaron siendo de 25.000 dólares en el 2006 para superar el millón de dólares cuatro años más tarde.
Hay correos en los que se discute cómo pueden escapar de las acusaciones de haber visto el contenido de los archivos que suben los usuarios durante la mudanza de todo el contenido adulto al portal alternativo Megarotic, que Megaupload utilizó para desviar todos los vídeos adultos. Antes de moverlo, todo ese contenido tenía que leerse. Y en teoría se prometía que nadie tenía acceso a la lectura de esos archivos excepto el que lo subía.
El departamento de justicia tiene antiguos usuarios de Megaupload como nuevos aliados, usuarios que antiguamente colaboraban intensivamente subiendo contenido pirateado al servicio a cambio de compensaciones económicas. Esos usuarios tienen detalles concretos acerca de cómo funcionaba el sistema de compensación y de las intenciones que tenía Kim Dotcom con toda esa actividad.
Kim Dotcom ganó 42 millones de dólares con Megaupload en el 2010. Su CTO, Mathias Ortmann, ganí 9 millones. El diseñador Julius Bencko ganó más de un millón, y el programador Bram Van Der Kolk ganó más de dos millones. El responsable de márketing ganó algo menos, 400.000 dólares, por no ser accionista. Otras transacciones indican gastos opulentos como alquileres de yates en el Mediterráneo por valor de 616.000 dólares.
El portal Megavideo generaba 25 millones de dólares en beneficios de publicidad, pero los suscriptores de pago generaban 150 millones de dólares.
Megaupload recibía miles de solicitudes legales para borrar archivos pirateados, pero los responsables se limitaban a eliminar los enlaces conservando el archivo en los servidores. Hay correos confirmando el borrado de esos archivos, cosa que no llegaba a ocurrir. Pasaba más o menos lo mismo con cuentas de usuarios reincidentes en subir contenido pirata y ser descubiertos: Megaupload mentía cuando decía que había eliminado esas cuentas de usuario.
Cuando Megaupload creció tanto que se podía permitir eliminar algunas de las cuentas reincidentes, lo hacía pero siempre bajo unos límites para poder seguir obteniendo beneficios a nivel general. Hay correos que describen cómo se acepta subir el límite de archivos a borrar de 2.500 a 5.000 simplemente porque "se podían permitir colaborar con ese ritmo de crecimiento".
Un 'top 100' de archivos más descargados en Megaupload mostraba archivos legales (tráilers de películas, versiones demo de algunos juegos), pero las pruebas indican que era una tapadera que ocultaba los archivos que realmente se usaban más. Ortmann, responsable técnico de Megaupload, admitía en un correo "una fachada inocente y una estructura interna privada".
Hay correos que revelan cómo Dotcom y los directivos de Megaupload discutían la contratación de abogados especializados previniendo un evento como el que ocurrió, diciendo que "si supieran que ganamos millones cada mes irían enseguida a por nosotros".
En otros correos incluso los directivos hablan sobre cómo ver algunas películas o series (concretamente Dexter, Los Soprano, Taken o Seinfeld) utilizando Megaupload, con la reflexión de que "no eran piratas de la era moderna, sino que eran un servicio de logística que utilizaban los piratas de la era moderna". Admitían también que había que limitar más la piratería, pero que entonces se eliminarían el 99,999% de los vídeos de Megaupload.
Megaupload incluso colaboró con investigaciones legales para tumbar a otros portales similares aportando pruebas contra ellos, eliminando así la competencia.
Para los que quieran entretenerse, aquí tenéis el documento completo con las acusaciones:
De momento los abogados de Megaupload ya han respondido diciendo que todas estas acusaciones son tergiversaciones de la realidad. El propio Kim también ha dicho la suya en Twitter, preguntándose irónicamente lo que se destaparía si las comunicaciones de Obama se destaparan de la misma forma con la que se ha destapado todo esto de Megaupload:
The DOJ turned 7 yrs of all my communications into 191 pages of nothingness. I wonder what 7 yrs of Obama's communications would reveal :-)
— Kim Dotcom (@KimDotcom) December 23, 2013
Tendremos que ver cómo progresa todo esto, pero viendo la cantidad de datos que se han sacado Megaupload lo va a tener difícil. Sobra decir que el futuro de Mega, bajo la influencia de Dotcom, también queda en entredicho.
En Genbeta | Kim Dotcom deja de ser el director de Mega
Ver 23 comentarios