Entregar un paquete de Shein en otra dirección ha acabado con el despido del repartidor, pero no vulneró la protección de datos

El repartidor entregó el paquete en otra dirección sin el consentimiento del destinatario

A diario son miles los paquetes que se reparten en España tras el aumento exponencial de las compras por internet y la aparición de nuevos sitios o aplicaciones que muestran ofertas casi irresistibles. Esto es lo que le ocurría a una chica que frecuentaba la tienda de Shein a la hora de comprobar nueva ropa o complementos.

Una chica que sufría algo que sin duda te sonará muy familiar: no recibía los paquetes correctamente en su destino. Pero en uno de sus paquetes algo era realmente extraño con el envío de GLS y acuse de recibo: se había entregado en una dirección diferente a la de su domicilio y como firmante aparecía su nombre pero un DNI parcialmente anonimizado que no era el suyo. ¿Qué había podido ocurrir?

Una mala entrega de un paquete acaba con el despido del responsable

Ya en el pasado hemos hablado de numerosos casos en los que el hecho de entregar un paquete a un vecino o dejarlo en una recepción requiere de tener la autorización expresa del destinatario a través de teléfono o por escrito. Si no, las multas que hemos visto han sido realmente cuantiosas. Y en este caso el email de acuse dejaba claro que "se ha entregado el paquete a un tercero, sin mediar su consentimiento'.

Ante este caso, esta chica presentó una denuncia ante la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD). En su denuncia se recoge que los datos personales fueron expuestos a un tercero sin su permiso, como son el nombre, los apellidos y su dirección.

La respuesta de la AEPD sin duda ha sorprendido: directamente la ha archivado sin dar respuesta. Entre las razones que dan desde la agencia es que "la confidencialidad solo se verá afectada cuando se posibilite el acceso por parte de un tercero a datos personales que no sean públicos", algo que no ha sucedido con esta afectada. Además, aluden a que la empresa incluye en las etiquetas la información imprescindible para su envío.

Pero aunque la AEPD estima que no hay pruebas claras para llevar adelante esta reclamación, la empresa de reparto GLS si que le ha dado una gran importancia a este gesto de su trabajador de haber dejado un paquete en otra dirección. Tales han sido las consecuencias que en el momento que se conoció este caso el trabajador dejó de trabajar en ENVIAPAQ, colaboradora de GLS a la hora de hacer esta entrega.

Imágenes | Mika Baumeister

Vía | Confilegal

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