Hace unos días nos hacíamos eco de IBM había decidido retirar toda su inversión publicitaria en X, la antigua Twitter, después de que la asociación Media Matters descubriera que publicaciones ensalzando a Hitler y al nazismo aparecían al lado de publicidad de grandes empresas como la mencionada, o como Apple, entre otras.
Ahora X ha cumplido la amenaza de su propietario, Elon Musk, de demandar a esta organización sin ánimo de lucro. En su momento Musk y Linda Yaccarino, consejera delegada de X, tacharon el informe de poco representativo de la experiencia general de los usuarios de X.
Sin embargo, varias empresas y no solo IBM, retiraron sus anuncios tras el informe que mostraba sus alegaciones. Ahora, la demanda afirma que Media Matters es legalmente responsable de las pérdidas económicas de la antigua Twitter.
Musk dice que Media Matters manipuló el algoritmo
Desde X no acusan a Media Matters de mentir, de hecho la demanda confirma que las capturas de pantalla que publicó la organización son reales. Pero alega que la organización "manipuló" el servicio para que X presentara los anuncios ofensivos.
"Media Matters ha manipulado los algoritmos que rigen la experiencia del usuario en X para eludir las salvaguardias y crear imágenes de las publicaciones pagadas de los mayores anunciantes de X junto a contenidos racistas e incendiarios".
La presunta manipulación consistía en crear una cuenta que siguiera exclusivamente una combinación de grandes marcas y contenido extremista, para luego "desplazarse sin cesar y refrescar su feed seleccionado a mano" hasta ver una confluencia de ambos.
El presidente de EE.UU también contra Musk
Lo cierto es que, como ya hemos visto el grave conflicto que está aconteciendo en Gaza donde miles de personas están siendo asesinadas se le está quedando grande a X, una empresa con una plantilla super recortada y sin apenas moderadores.
La idea de Musk de tener una red social basada en la "libertad de expresión" y el "periodismo ciudadano" se muestra ahora como una plataforma plagada de bulos y desinformación que gente que no entiende nada de la historia o la geopolítica que rodea a Palestina comparte desde sus casas.
Incluso Joe Biden, presidente de Estados Unidos, o Kamala Haris, la vicepresidenta, han recriminado a Elon Musk que su red social permita discursos antisemitas (también hay mucha islamofobia) y hoy mismo han abierto un perfil en la competencia: la red Threads del imperio Meta.
Imagen | Xataka
Ver 2 comentarios