Microsoft sigue superan todas las expectativas de Wall Street en lo que se refiere a resultados financieros. Sus ingresos en el tercer trimestre del año fiscal 2019 aumentaron un 14%, alcanzando los 30.600 millones de dólares. En beneficio neto, la compañía de Redmond creció al 19%, lo que supone alcanzar 8.800 millones de dólares. Lo más interesante es, sin duda, repasar cómo han logrado llegar a este momento de salud financiera, que se explica desde su profunda reconversión.
Actualmente, Microsoft tiene tres grandes patas: Productividad y negocios, Intelligent Cloud, y Personal Computing. Las tres cuentan con buena salud, pero yendo por parte, veremos que Intelligent Cloud, con Azure como estrella, se lleva la palma. La división de servidores y servicios en la nube creció un 27% sobre el mismo período del año anterior, y dentro de ella Azure volvió a crecer al 73%.
Office, la estrella de Productividad y negocios, también sigue dando grandes réditos, y por ejemplo Office 365 Commercial creció un 30%. En la parte de Office para consumidores, la compañía creció al 8%, y Office 365 ya alcanza 34,2 millones de usuarios. LinkedIn crece incluso más, alcanzando un 27% más de ingresos que el año anterior.
Dentro de Personal Computing, las licencias de Windows a fabricantes crecieron un 9%, mientras que los productos comerciales de Windows y servicios en la nube crecen en un 18%. Es decir, incluso lo más "tradicional" de Microsoft va viento en popa. La división de hardware, Surface, también crece un 21%.
Microsoft se convierte, por momentos, en la tercera gran tecnológica en alcanzar el billón de capitalización bursátil
Los resultados de Microsoft le auparon un 3,2 en las operaciones tras el cierre, lo que llevo a que la capitalización bursátil de la compañía superara, durante media hora, la cifra mágica del billón de dólares, que hasta la fecha sólo habían logrado Apple y Amazon. No tardó mucho en bajar, pero sin duda es una anécdota que expresa que las tres compañías, junto con Alphabet, se encuentran en un momento de forma espectacular en bolsa, tras los desplomes de 2018.
Facebook, por ejemplo, se encuentra cerca de los 600.000 millones de dólares de capitalización, mientras que Netflix aún tiene que alcanzar los 200.000. Apple superó la cifra mágica con soltura en agosto de 2018, pero no tardó mucho en caer muy por debajo, hasta ahora, que está volviendo a crecer mucho.
Los usuarios pueden pensar que esto no va con ellos, sino que es sólo una cuestión de inversores. Y por una parte, ciertamente, lo es. Sin embargo, con los grandes beneficios que están acumulando las tecnológicas, podremos seguir viendo grandes inversiones en investigación y desarrollo que llevarán, a medio y largo plazo, a nuevos productos no posibles en la mayoría de casos sin ese grado de acumulación de capital.
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