A día de hoy es bastante común explorar aplicaciones y formas tecnológicas para organizar nuestro día a día y aumentar la productividad. Pero aunque estamos en la era de la digitalización con la inteligencia artificial en lo más alto de su potencial, la realidad es que la última moda es apuntar todo en una agenda japonesa. A la antigua usanza: con papel y lápiz.
Hay muchas aplicaciones para nuestro móvil y nuestro ordenador que nos permite agregar las tareas que tenemos pendientes. O incluso apuntar los eventos más importante en los calendarios digitales. Pero tienen un problema: son demasiado eficientes. Tanto que no te permiten ni reflexionar.
El método analógico vuelve a ponerse de moda
Es por ello que ya muchos han decidido optar por la "productividad analógica". No es ningún enfoque moderno, ya que es lo que hemos todos en alguna ocasión en el pasado antes de que existiera el móvil: usar una agenda de papel y apuntar todo a mano.
Y al final algo que parecía pasado de moda, ha vuelto a estar en 'boca de muchos. Un sistema híbrido que apuesta por hacer un balance entre lo analógico y lo digital para que cada uno cree su sistema de productividad personal.
A la hora de anotar todo lo que debemos hacer de manera analógica lo que se trata es que no nos olvidemos de ellos. De esta manera, los expertos apuntan a que se reduce la carga mental y por ende el nivel de estrés. Algo que quedó demostrado con un estudio hecho en la Universidad Mount St. Vincent en Canadá en el que se jugaba a un juego de cartas que consiste en recordar las parejas de las cartas.
Para ello un grupo de estudiantes podían tomar notas de la posición de las cartas, y otros debían confiar en su memoria. En un momento dado a los que podían tener notas se las retiraron, y vieron que no recordaban apenas la posición de las cartas. Esto se debía a que la mente no se había esforzado por memorizar al estar ya escrito en un papel.
Si bien, otros estudios apuntan a que el hecho de tomar apuntes a mano involucra a diferentes mecanismos relacionados con la memoria y el aprendizaje. Por ello escribir nos permite afianzar conceptos y conocimientos para anclarlos en la memoria a largo plazo. Es por ello que se crea la idea de apuntar todo lo que te pasa en el día para poder conectar todos los inputs del medio para que la información perdure.
Aquí es donde entran las aplicaciones de productividad que nos permite anotar todo lo que tenemos que hacer. Pero para ello se requiere de aprendizaje. Esto no ocurre en el método analógico con un lápiz y un papel donde no hay brechas digitales importantes.
Vía | Xataka
Imágenes | JESHOOTS.COM My Profit Tutor
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