Un desconocido suelta un artefacto explosivo junto a la Acampada de Palma y sale corriendo

El estallido de un artefacto explosivo a las 12.30 horas de hoy ha causado dos heridos leves en la Plaza de España de Palma de Mallorca, un lugar próximo al campamento de los indignados del 15-M. Según fuentes presenciales, una persona acudió a la plaza, dejó el artefacto en una papelera y salió corriendo. Desde #AcampadaPalma han condenado “este acto violento que ha puesto en peligro la seguridad de las personas, tanto las que pasaban por la plaza como las que están allí acampadas”.

Hoy, varios medios, por ejemplo El País, han publicado una fotografía captada por los ciudadanos que protestan frente al Parlament de algunos supuestos infiltrados que pertenecerían a las fuerzas de seguridad. Según algunas versiones “atizaban” a la violencia.

Esperamos que la estrategia de la tensión o la provocación no vaya a más, esta mañana, por ejemplo, se podía escuchar en una emisora de radio que los que acamparon en la Puerta del Sol desde el principio son la peor gentuza de España y además huelen mal. Lo que viniendo de una emisora de concesión gubernamental y generosamente sufragada con dinero público, les debe sobrar, debería inquietar tanto a los responsables políticos más sensatos – los hay pero no se llaman Bono – como a los “indignados” para no provocar más ni caer en provocaciones.

El miedo a perder privilegios y pactos, si se hace una reforma de la ley electoral (un español un voto) que la SpanishRevolution ha agitado, lo quieren combatir algunos desacreditando al movimiento civil que ha abarrotado las plazas y que va mucho más allá de los acampados. Lo de los falsos perroflautas, por ejemplo, es más habitual de lo que imagina el ciudadano medio, un juego de niños para la “inteligencia global”. Que se los digan a los amigos de la televisión pública noruega después de encontrar lo que encontraron en aquella habitación.

El poder quiere que volvamos al redil o mundo feliz en el que el político de turno o un tertuliano de la partitocracia nos contará que las leyes aprobadas en el Parlamento (la Ley Sinde o la Ley Electoral) tienen el apoyo de la mayoría. Aunque luego se consulta a los ciudadanos y el 95% vota en contra. Aquí, por si acaso, ni nos preguntan. El sistema de la partitocracia daña el sistema democrático. Pero están sordos y no pueden cambiar. Hace mucho que han traspasado todas las líneas rojas. Su único temor es el voto antisitema (antipartitocracia) en las elecciones generales. El movimiento NoLesVotes acertó y marcó el camino. Algunos están muy interesados en que no se vea.

Foto | acampadapalma.es

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