Cinco millones de parados, un 60% de los asalariados cobrando menos de 1.000 euros, el BCE recomendando pagar sueldos de 400 euros y subir el IVA, pero la ministra de Cultura del PSOE no tiene empacho en despilfarrar el dinero de los españoles en hoteles de lujo en su gira de despedida (México-Nueva York-Moscú) acompañada de un séquito de comisarios y comisarias culturales.
Según informa el diario ABC en su edición de este jueves, la ministra de Cultura había reservado en Moscú una habitación estándar en el Hotel Nacional, también de cinco estrellas, a un precio más económico, pero se anuló el 18 de noviembre. “El Nacional tiene más solera que el Baltschug por ser uno de los hoteles de lujo moscovitas más antiguos y emblemáticos, pero en este caso hubiera salido más barato”, explica el corresponsal de ABC en Moscú. Es en el Baltschug Kempinski, donde González-Sinde tiene reservada una Suite Studio con vistas a la Plaza Roja y la catedral de San Basilio. El aposento tiene casi 70 metros cuadrados, baño de mármol con cosméticos de lujo de la firma Molton Brown y el aparato de televisión incluye reproductor de DVD. El precio oficial de la suite es de 42.500 rublos la noche (unos 1.000 euros) más 18% de IVA.
Es la otra forma de okupar un hotel a cargo del presupuesto público, como aquel otro que los okupas del PP tomaron al asalto (de las arcas públicas) para alojar a las traductoras rumanas que hablaban francés, griego y el kamasutra. Sin decoro, Sin decencia.
Con o sin ley electoral estafa. Con o sin televisiones a su disposición (también okupadas). Con o sin jueces y fiscales a su disposición (Justicia okupada). No hay mayoría de escaños que avale a los “okupas” para poder despilfarrar y cachondearse de los españoles (ver indulto al banquero). Por eso una inmensa minoría de españoles indignados no tragará con las élites de la corrupción política, financiera y cultural. La España servil de los Santos Inocentes, devota del PPSOE (y CiU), no arruinará el futuro de España.
Desde algunas de la mejores suites del Hotel Baltschug Kempinski se alcanza a ver la plaza de la Revolución que los indignados rusos ocuparán el sábado en protesta por el fraude electoral, los abusos y la corrupción del poder. Sinde estará en la capital rusa hasta el próximo domingo y tendrá la oportunidad de presenciar el evento en primera fila. La imagen de la indignación que en España también ha tomado las plazas y las calles para denunciar a las élites que se ríen de los ciudadanos y de su sufrimiento.