El conseller de Interior de la Generalitat de Catalunya, Felip Puig, ha asegurado en una entrevista a Rac-1 que se está planteando solicitar a YouTube que elimine los vídeos en los que los indignados denunciaban a los policías infiltrados que iniciaron los actos violentos el pasado 15 de junio en Barcelona.
No contento con adelantar un acto que sólo puede ser calificado de pura censura informativa, Puig advierte que “alguna reflexión tendremos que hacer” frente a los acampados que aún permanecen en Plaça Catalunya. ¿La razón?: “el nivel de utilización del espacio público está evitando que miles o millones de ciudadanos puedan ejercer su derecho a disfrutar del espacio comunitario“.
Un argumento cuanto menos sorprendente si tenemos en cuenta que fue el propio Puig, junto con el Ayuntamiento de Barcelona, quien ordenó cerrar al público el Parc de la Ciutadella, obligando a desalojar a todo aquel que se encontraba en este espacio público. Cabe recordar que, en cambio, los indignados de la acampada Barcelona no excluyen a nadie del uso de la plaza como parece querer hacer ver el responsable de Interior catalán.
Sin embargo Puig afirma que “si no se produce ningún tipo de atentado contra la seguridad ciudadana seguiremos observando con mucha prudencia y mayor intensidad”, aunque añade que la situación “no se puede permitir mucho tiempo más”.
A esto, e ignorando por completo las grabaciones que apuntan a la utilización de agentes infiltrados para despertar la violencia, el conseller afirma que “estamos delante de profesionales de la violencia”. Entre 300 y 600 personas “perfectamente organizadas” que intentan “pervertir el sistema, dar una mala imagen del país y alterar el orden público y la convivencia”. No, no se refiere a la actuación de los Mossos d’Esquadra el pasado 27 de mayo, sino a indignados “claramente antisistema” a los que se propone “desenmascarar”.
Vía | Rac1 (catalán)
Foto | Convergència Democràtica de Catalunya
