En el día de hoy se ha presentado una querella contra el consejero de Interior de la Generalitat, Felip Puig, altos mandos y agentes de los Mossos d’Esquadra por las cargas policiales del pasado 27 de mayo en la acampada de la plaza Cataluña de Barcelona. Ángel Badía, que ha presentado la querella, considera que fue un ataque “injustificado y desproporcionado” a ciudadanos no violentos.
El abogado Josep Jover ha explicado que la querella se fundamenta en que el procedimiento fue equivocado, y se usaron armas no reglamentarias como porras extensibles con bolas de acero.
Para Jover los agentes que actuaron, como sus responsables, podrían haber incurrido en delitos de lesiones y de robo. En la querella se denuncia que se han producido daños en las propiedades privadas de las personas y que la policía se apropió de datos de carácter personal de más de 30.000 ciudadanos al requisar, sin mandamiento judicial, los ordenadores de los acampados.
Por su parte, Ángel Badía, que también forma parte de la comisión de comunicación de la acampada, ha explicado que la policía les requisó todos los ordenadores, les dieron golpes y los dejaron en un descampado, de donde muchos no han podido recuperarlos.
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