Una de la múltiples aplicaciones que posibilitan la técnica de computación distribuida o compartida es la participación ciudadana en proyectos de investigación, colaborando de forma altruista en los proyectos que eligan. La plataforma de computación ciudadana Ibercivis nos ofrece la posibilidad de que nuestro ordenador sea un aporte a la investigación.
Es necesario disponer, además de un ordenador como es lógico, de una línea ADSL para posibilitar la comunicación. Se trata de poner a disposición de la comunidad los recursos de nuestro ordenador que no utilizamos. La capacidad de cálculo que puede aportar cada equipo dependerá del tiempo de actividad que tenga el ordenador, su capacidad técnica y el ancho de banda que tengamos.
Para ello es necesario instalar previamente un programa que será el que nos ayude a gestionar los recursos que prestamos a Ibercivis. De esta manera aprovechará los tiempos de inactividad de nuestro equipo en favor de los proyectos de la comunidad. Estos proyectos van desde la investigación médica o de nuevos materiales, etc.
Es aquí donde está la clave para el funcionamiento del sistema. Si el proyecto es interesante para la comunidad, tendrá un mayor número de personas dispuestas a colaborar, y por lo tanto, una mayor capacidad de cálculo. Por lo tanto tendrá más fácil conseguir los objetivos marcados en el mismo.
La capacidad de cálculo para este tipo de proyectos de investigación es fundamental, y si proyectos como este triunfan, no será necesario invertir en grandes supercomputadoras que al final acaban por “alquilar su capacidad de cálculo en distintos proyectos. Una iniciativa muy interesante de la que seguro muchos quieren formar parte.