Las acciones de Netflix han caído un 9% como consecuencia directa del fracaso en las negociaciones de renovación de contrato con uno de sus mayores proveedores de contenido, Starz. La falta de acuerdo, que fue evidente el jueves cuando definitivamente se rompieron las negociaciones, dejará a Netflix sin un buen puñado de programas de televisión por cable, además de un alto número de blockbusters.
El pasado jueves, Starz rompió las negociaciones para renovar el contrato. Según el comunicado emitido, “la decisión es el resultado de la estrategia para proteger la alta calidad de nuestra marca mediante la preservación el precio adecuado de nuestros contenidos exclusivos y de gran valor”. En otras palabras, Starz quería más dinero del que Netflix estaba dispuesto a ofrecer.
Una portavoz de Starz añadió: “Con la actual situación de derechos de estudio y el aumento de programación original, la cadena está en una posición excelente para evaluar nuevas oportunidades y expandir el negocio en general”.
La ruptura de las negociaciones significará una pérdida de miles de películas de estudios tan importantes como Disney o Sony, que desaparecerán del catálogo a partir del próximo 28 de febrero. Precisamente, Netflix calificó el contrato con Starz hace unos meses como “uno de los acuerdos más importantes” para la compañía.
Ya en junio desaparecieron un buen número de títulos producidos por Sony como resultado de lo que Netflix denominó “problemas temporales de contrato” entre las compañías. Problemas que en estos momentos se han agravado. Starz y Netflix llevaban en negociaciones desde el 2008, cuando terminó el anterior contrato.
Últimamente, Netflix se ha topado con varios inconvenientes en lo que se refiere a acuerdos de emisión de contenidos. Algunos estudios han aumentado los precios de las licencias e incluso han llegado a imponer un retraso de 30 días antes de que la empresa de streaming pueda acceder a películas nuevas. Todo ello no hace más que perjudicar al consumidor, que ha visto cómo se han subido las tarifas de suscripción de forma abrupta.
Problemas de licencias como este no hacen más que aumentar la preocupación por el catálogo que pueda ofrecer Netflix en España cuando desembarque los próximos meses. Mucho se ha especulado sobre qué contenidos ofrecerá, dado el alto precio a pagar en nuestro país, y cómo los ofrecerá: ¿versión original, con subtítulos, doblados, con opciones a elegir? Aún tendremos que esperar un tiempo para conocer las características concretas del servicio en España, pero dada la falta de acuerdo el panorama no es muy alentador.
Vía | The Guardian Foto | Jamiesrabbits