La juez militar Denise Lind, que preside las audiencias previas a la celebración del juicio contra el soldado Manning, ha dictaminado que cualquier sentencia que se dicte en su contra deberá ser reducida en 112 días, como compensación por haber sido maltratado durante su detención en la prisión militar de Quantico, en Virginia.
Manning permaneció confinado en una minúscula celda (23 horas al día) durante diez meses en régimen de máxima seguridad y prevención de suicidio aunque dos psiquiatras militares recomendaron el levantamiento de esas medidas... una semana después de su confinamiento.
La defensa de Manning había pedido a la juez que desestimara el caso en su totalidad por violación de los derechos del detenido: la victoria de la defensa se ha quedado en simbólica.
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