La empresa NPO Energomash, orgullo nacional, ha desarrollado el 90% de los motores que impulsan los cohetes de la industria espacial y militar rusa. Sus instalaciones, se supone, son de Alta Seguridad. Pero la joven bloguera rusa, Lana Sator, se ha colado en la fábrica, ha hecho fotos y las ha colgado en su blog. El escándalo es mayúsculo.
Nada más y nada menos que el Vicepresidente del gobierno ruso para asuntos de defensa, Dmitri Rogozin ha tenido que salir a la palestra para calificar de inadmisible la entrada de personas no autorizadas en el interior de instalaciones de ¿alta seguridad? y demandar medidas urgentes para evitar que estas situaciones se puedan volver a producir en el futuro.
La bloguera y sus amigos se pasearon hasta cinco veces por las instalaciones de una fábrica que forma parte del programa de misiles estratégicos y que parece una chatarrería abandonada. La joven bloguera ha documentado las visitas con un montón de fotografías de la decrépita fábrica.
Se colaron por un agujero de la valla y llegaron hasta la sala de control. El viceprimer ministro Dmitry Rogozin, que además es el enlace ruso con la OTAN, dice que la falta de seguridad es “inaceptable” y ha advertido a los “descarados ratones de los blogs” que se mantengan alejados de las instalaciones estratégicas a partir de ahora. Ojito.
Foto | lana-sator.livejournal.com