Cuenta hoy El País lo del contrato de Indra y Gadafi para modernizar su obsoleto sistema de defensa aérea que incluía nueve radares tridimensionales fijos y móviles; centros de mando y control, equipos de guerra electrónica y sistemas de comunicaciones. Su importe superaba los 200 millones de euros.
Sin embargo, aunque las negociaciones se iniciaron en 2006 y recibieron un nuevo impulso en enero de 2009, con motivo de la visita del Rey a Trípoli - donde Gadafi le recibió en las ruinas de su palacio de Bab el Azizia, bombardeado en 1986 por orden del entonces presidente de EE UU Ronald Reagan -, el contrato nunca llegó a firmarse, según aseguró ayer un portavoz oficial de Indra.
Lo que sí hizo la compañía española, líder en el sector de tecnologías de la información, fue implantar un nuevo sistema automático de control del tráfico aéreo en Libia, con centros de control en las ciudades de Trípoli, Bengasi y Al Jufra.
La adjudicación se produjo en 2006, por un importe total de 48 millones de euros, y el nuevo sistema se implantó en los años siguientes. En 2009, se entregaron tres radares para navegación y control del tráfico aéreo civil por 12,7 millones.
El contrato que si se ha adjudicado Indra es el del despliegue tecnológico para cubrir las elecciones municipales del próximo 22 de mayo que adjudica el Ministerio del Interior de Rubalcaba. La multinacional española implementará por primera vez en unas elecciones municipales su solución de administración electrónica de la mesa electoral con el fin de agilizar e informatizar las tareas de los miembros de mesa durante el día de votación.
Asimismo, la compañía facilitará más de 10.000 dispositivos PDA, que proporcionarán una cobertura superior al 65% del electorado, para la transmisión de datos desde las mesas electorales. INDRA explicó que el uso de estos dispositivos agiliza el proceso y reduce el riesgo de error humano al introducir controles adicionales, eliminar tareas repetitivas y automatizar el envío de información.
Además, para la difusión de resultados de estos comicios, se ha planteado una comunicación multicanal para facilitar información en tiempo real, tanto a los ciudadanos como a los medios de comunicación y autoridades, a través herramientas como el portal electoral o aplicaciones de consulta de datos.
Indra ha sido acusada de de fraude electoral en Venezuela, Argentina y otros países por políticos de la oposición. La Guardia Nacional es además del Ministerio del Interior de Chávez y PDVSA (Petróleos de Venezuela, Sociedad Anónima) uno de los principales clientes de Indra en Venezuela. En Argentina la contratación de los servicios de Indra que impulsó el Ministerio de Interior a cargo de Aníbal Fernández, le costó al Estado argentino más de 38 millones de dólares.
Según el diario PERFIL la adjudicación de esta licitación contó con el visto bueno de la Sindicatura General de la Nación. Ese mismo organismo estatal de control, según el diario argentino, habría detectado en 2004 que Indra cometió "irregularidades" en los comicios que llevaron a Néstor Kirchner a la Presidencia. Entre otras cosas el citado organismo dictaminó que "se han constatado inconsistencias en la carga de datos".
Indra también estuvo en el ojo del huracán por los numerosos errores producidos en la consulta electrónica sobre la reforma de la Diagonal de Barcelona. Lo que no impidió que semanas después la gran multinacional española se adjudicase el escrutinio de las elecciones autonómicas catalanas.
Mientras en el Reino Unido ha estallado la polémica al adjudicarse a la empresa de armamento Lockheed Martin el tratamiento y actualización del censo. Con el censo trabaja Indra hace años pero en España no hay polémica... ni oposición. Aquí somos como somos. Dimisión de poderes. A la guerra sin pasar por el Parlamento.
Los dos accionistas de referencia de Indra son Caja Madrid (20%) y los March (10%) a través de Corporación Financiera Alba. Los otros dos socios institucionales con un 5% cada uno son CajaAstur y la familia Del Pino a través de Casa Grande de Cartagena. La mayoría (60%) es capital flotante (Free-float). El Consejo de Administración está presidido por Javier Monzón.
Indra es la primera multinacional española de tecnologías de la Información, Seguridad y de Defensa. También aspira a hacerse con las torres de control que van a ser privatizadas... y a seguir colaborando con Lockheed Martin. Según el Ethisphere Institute es además la única empresa española que aparece entre las compañías más éticas del mundo junto a Microsoft.