La Wikipedia nos habla de hacktivismo como un acrónimo de hacker y activismo, “la utilización no-violenta de herramientas digitales ilegales o legalmente ambiguas persiguiendo fines políticos. Estas herramientas incluyen desfiguraciones de webs, redirecciones, ataques de denegación de servicio, robo de información, parodias, sustituciones virtuales, sabotajes virtuales y desarrollo de software”.
Los primeros pasos de la utilización consciente de técnicas hacktivistasen el sindicalismo español se dieron en el conflicto de la empresa Integranova. Una sección sindical de la CGT fue despedida al completo en enero del 2008. ¿El motivo? simplemente el intentar impulsar elecciones sindicales en al empresa. La campaña de solidaridad que se creó para denunciar el caso hizo un uso intensivo de la parodia durante el conflicto, y tuvo su efecto. Un punto irrenunciable de la empresa para el fin del conflicto supuso la retirada de las imágenes jugando con la imagen corporativa de la entidad, que además parodiaban también al entonces director de la empresa Jose María Alfonsel.
Durante el conflicto llegó una grata sorpresa a las personas implicadas en la lucha en Integranova: un comunicado del hacklab Kernel Panic de Barcelona, solidarizándose con la lucha de las y los sindicalistas de la empresa y recordando que hay que vender cara la fuerza de trabajo. El conflicto en Integranova y la campaña de solidaridad posibilitó que, aunque el conflicto acabó en empate entre la empresa y la sección sindical, se generara un ámbito estable de lucha sindical en el sector y a nivel estatal: nacía la Coordinadora de Informática de CGT.
El sector TIC es de los más refractarios al desarrollo de luchas colectivas y/o implantación de los diferentes sindicatos existentes en el sector. Un buen resumen de la mentalidad de las personas que trabajan en las TIC se realizó recientemente en blog La pulga y la locomotora, escrito al calor de la movilización estatal del sector el 30J. En ese certero análisis, se planteaba que el sector de las TIC “se trata del primer gran sector nativo neoliberal. Y eso explica muchas cosas. Por ejemplo, por qué se ha deslocalizado tan rápido. Por qué se juega tan hábilmente con el concepto de carrera profesional. Por qué las consultoras hacen y deshacen a placer, por qué son lobby desde la casilla cero. Y sobretodo, cómo se aísla con tanta facilidad a las personas, en un entorno superpoblado, de miles de profesionales”.
La Coordinadora Informática ha intentado siempre incorporar las enseñanzas y técnicas del hacktivismo a su realidad sindical, en empresas del sector donde la dispersión de las y los trabajadores del sector en los clientes dificulta muchísimo la acción sindical de corte clásico. Internet en general y las redes sociales en particular es un nuevo campo de batalla donde los sindicatos también pueden actuar. En el 2009 la Coordinadora de Informática participó en el Hackmeeting de Madrid con un debate sobre sindicalismo en el sector de las TIC, y tomó muy buena nota del Manual de desobediencia a la Ley Sinde y de las prácticas de la red Hacktivistas, que influyeron de manera determinante la evolución de la presencia en Internet de la Coordinadora de Informática y sus luchas en el sector TIC.
Después de la huelga indefinida en Alalza Sistemas de Información - la primera huelga de estas característicasdel sector -, multiples conflictos en empresas y movilizaciones, la Coordinadora Informática afronta, como todos los sectores productivos y servicios públicos, un otoño caliente de movilizaciones. La ejemplar y durísima lucha en la empresa Hewlett-Packard y la movilización en Madrid del 20S son los próximos retos del sindicalismo en el sector TIC. Como se refleja en el comunicado convocando al 20S “cada vez más y más personas del sector TIC están reflexionando sobre estas cuestiones. Se acerca la Singularidad, se acerca la hora en que las y los trabajadores del sector TIC se darán cuenta que son obreros con teclado“.
David García Aristegui es licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad Complutense de Madrid. Durante los últimos doce años ha trabajado como desarrollador de software, especializado desde el 2005 en el campo de la bioinformática y el software libre científico. Es el co-director de Comunes (Radio Círculo), uno de los únicos programas de radio existentes hasta la fecha dedicado en exclusiva a la propiedad intelectual, derechos de autor y copyleft. Ex-músico y muy interesado en el movimiento copyleft, ha escrito diversos textos relacionados con la cultura y el conocimiento libre, dando recientemente varias charlas sobre todos los conflictos que la propiedad intelectual está generando en el ámbito académico y científico. David García Aristegui es miembro de la Asociación Cultura Libre.
Ahora también es colaborador de Nación Red.