Curioso, lo que sucedía en Australia con los anuncios de Google. En un anuncio donde se leía "honda.com.au" el usuario hacía click y acababa en la página de venta de coches online Car Sales. En otro, donde se leía "Harvey World Travel", el usuario hacía click y se iba directo a la competencia, a la agencia de viajes STA Travel. Total, debía de pensar alguien, de lunes a martes...
¿Se trataba de una oda al juego del teléfono roto? No, más bien de prácticas abusivas por parte de los usuarios del servicio de publicidad AdWords de Google. Un jurado ha determinado que Google ofreció varios anuncios que se consideran falsos y engañosos. Por eso, el Tribunal Federal de Australia revoca una sentencia absolutoria dictada en septiembre de 2011 y condena a la empresa a hacer cambios para evitar actos parecidos en su sistema Adwords. También la condena a correr con las costas y poco más, ya que la ley australiana sobre prácticas comerciales no prevé multas para actuaciones como estas.
Google se ha mostrado decepcionada por la decisión y está considerando apelar ante el Supremo:
Google AdWords es una plataforma de anuncios de alojamiento y creemos que los anunciantes deben ser responsables de los anuncios que crean en la plataforma de AdWords.
La sentencia sirve, por el momento, para situar qué parte de responsabilidad tienen las empresas como Google en los engaños que realizan sus propios clientes, y da un aviso a navegantes. ¿Se lo merece o no Google? Seguramente no, pero en países como Francia, por ejemplo, se quitan el problema de raíz al evitar que en un anuncio aparezca el nombre de la competencia. Así no hay lugar para la... confusión.
Vía | Business Week