Si ves que la derrota es casi inevitable prueba a suspender el partido forzando el reglamento. Es el plan B de los partidarios del ACTA: suspender la votación de mañana con la excusa de que conviene esperar a conocer la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea sobre la legalidad del ACTA.
En eso están los del Partido Popular Europeo y la Comisión de Barroso (popular) con Karel de Gucht (liberal) maniobrando detrás y delante del telón. Los conspiradores del lobby en la Comisión y el PPE no tienen muchos apoyos en otros grupos (liberales, socialistas, euroescépticos...) pero quizás los suficientes para conseguir su objetivo en el caso de que puedan forzar, que no parece probable, una votación que no está en el orden del día y que ya había quedado descartada/derrotada en comisión.
El debate político sobre el ACTA no es sobre su eventual legalidad o ilegalidad, no es judicial, lo es en términos políticos. Unos lo consideran regresivo y otros "necesario".
En Nación Red | La Comisión Europea apela al Estado de Derecho para retrasar la votación sobre el ACTA