Nos comentaba este verano un periodista del satírico más serio de Francia que la obsesión de Sarkozy es el algoritmo de búsquedas de Google. ¿Por qué sale una cosa y no otra?. También puestos a ejercer de paranoicos o celosos de nuestro trabajo, nos hemos preguntado aquí en Nación Red, ¿por qué dejamos de salir en Google News coincidiendo en fecha con la publicación de algunos postescasamente cariñosos hacia la actuación de la compañía del buscador? Cosas de trabajar tanto. Pequeñas paranoias, probablemente.
Pero el que no parece un paranoico, aunque todo puede ser, es el procurador general de Texas, Greg Abbott, que ha abierto una investigación antimonopolio sobre cómo Google clasifica los resultados de búsqueda. El primer caso en los Estados Unidos que ataca el corazón del negocio de la primera compañía de búsquedas - y de casi todo lo demás - en el planeta internet.
El tema en cuestión - la neutralidad de búsqueda - es si Google manipula los resultados para impedir la competencia y avanzar en sus propios negocios. Hay empresas que se preocupan de que Google tenga "todo" el poder para discriminar mediante la reducción de sus listas de resultados de búsqueda o de carga de tarifas más altas por sus anuncios de búsqueda de pago.
"Todo este asunto de la forma (vertical) con que Google trata a estos competidores es un gran problema", explica a The New York Times, Gary L. Reback, un abogado en Carr & Ferrell en Palo Alto, California, quien ha asesorado a pequeñas empresas que han presentado casos antimonopolio contra Google.
Google se defiende atacando de manera grosera: "no es sorpresivo que algunos sitios Web menos relevantes y de menor calidad estén descontentos". Ya no es lo que era.
La "neutralidad de búsqueda" va a dar mucho que hablar. Allí y aquí.
Más Información | The New York Times Foto | Spencer E Holtaway