La Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior (LIBE) del Parlamento Europeo es responsable de la legislación y supervisión democrática de las políticas relacionadas con la transformación de la Unión Europea en un espacio de libertad, seguridad y justicia (artículo 3 del Tratado UE). Estas políticas están íntimamente relacionadas con la aplicación de la Carta de los Derechos Fundamentales en el territorio de la UE y con el fortalecimiento de la ciudadanía europea.
Pero ayer la citada Comisión de Libertades desestimó la propuesta de la eurodiputada liberal holandesa Sophie in 't Veld que proponía vetar el acuerdo para ceder a Estados Unidos los datos personales de los pasajeros aéreos, el Passenger Name Record (PNR), en el marco de la lucha contra el terrorismo y la delincuencia transfronteriza.
En la votación final hubo 31 votos a favor del acuerdo, 22 en contra y una abstención. El pacto deberá ser ratificado por el pleno del Parlamento Europeo el 20 de abril. Los socialistas (el grupo S&D) no tienen claro que hacer o no tiene una postura común.
De aprobarse, como parece, los datos personales de los viajeros europeos que se transferirán a los ordenadores del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU., incluirán el nombre, la dirección, el número de teléfono, los detalles de la tarjeta de crédito, información sobre el equipaje. También información como la elección del menú por motivos religiosos o cualquier petición personal de asistencia médica.
La información personal de los viajeros será almacenada en una base activa durante cinco años. Después tu información se trasladará a una base de datos durmiente durante 10 años, "con requisitos de acceso más estrictos para los funcionarios estadounidenses", matizan los partidarios del acuerdo.
La Unión Europea y Estados Unidos cuentan con un acuerdo sobre transferencia de datos de pasajeros desde los atentados del 11-S de 2001 en Nueva York y Washington. El último, provisional, se firmó en 2007. Uno de los políticos europeos que más se ha destacado en la defensa del acuerdo ha sido Alfredo Pérez Rubalcaba, por cierto.
El gobierno francés no dudó en relacionar los crueles asesinatos de Toulouse y Montauban con la necesidad de dotar a la Unión Europea de instrumentos como la transmisión de datos de pasajeros aéreos, y pidió que su adopción tenga lugar antes de que termine este semestre. En un comunicado difundido por el Ministerio del Interior francés se urgió al Parlamento Europeo a ratificar el acuerdo antiterrorista alcanzado con EEUU sobre el llamado Passenger Name Record, el PNR.
Sophie in 't Veld, la eurodiputada liberal que proponía vetar el acuerdo para ceder los datos de los viajeros a Estados Unidos, ha calificado la votación de la Comisión de Libertades del Parlamento Europeo de "golpe a las libertades civiles".
Para la eurodiputada Sophie in 't Veld, el tiempo de retención de los datos es "excesivo", en algunos casos "por tiempo indefinido". Además denunció que no se había llevado a cabo un estudio de impacto que demostrase la necesidad del registro de datos a tenor de su efectividad a la hora de prevenir atentados.
Según Sophie in 't Veld, los resultados conseguidos en la lucha antiterrorista, son "irrisorios" en comparación con la intromisión a la privacidad que supone el acuerdo y el esfuerzo económico que significa para las autoridades y las aerolíneas. Igualmente, destacó que las posibilidades de recurso contra las autoridades estadounidenses por los ciudadanos europeos "está en duda en la práctica" porque exigiría una modificación de la legislación norteamericana.
Foto | monikahoinkis