¿Qué tienen en común Apple, Microsoft, Autodesk, Bentley Systems, Dell, Corel, Intel o Kaspersky? Todas ellas dan apoyo, de manera indirecta, a SOPA (Stop Online Piracy Act), ese proyecto de ley que pretende cerrar cualquier web que utilice material con copyright sin el consentimiento del autor, sin tener en cuenta matices como, por ejemplo, el fair use.
Todos estos gigantes del sector tecnológico forman parte de la Business Software Alliance (BSA), una asociación internacional sin ánimo de lucro que defiende los intereses de compañías relacionadas con el desarrollo y la venta de software. Entre las prioridades de la BSA están fomentar la innovación del sector, pero también ejercer como lobby para que se aprueben leyes como, en este caso, SOPA. De hecho, en su página web, “proteger la propiedad intelectual” figura como su prioridad número uno.
La BSA, en relación con los debates políticos sobre SOPA de estos días, ha afirmado:
La Business Software Alliance felicitó hoy al presidente del Comité Judicial de la Cámara Lamar Smith (R-Texas) por la introducción de la Stop Online Piracy Act (HR 3261) para frenar el crecimiento de la piratería de software y otras formas de robo de propiedad intelectual que se cometen por sitios web ilegales.
Lo más curioso del caso es que la misma Apple podría ser una de las compañías más perjudicadas por SOPA, ya que iTunes Match, el nuevo y flamante servicio de música en la nube de los de Cupertino, juega en ocasiones al borde de la legalidad.
Por otra parte, hay una gran parte del sector industrial tecnológico que está frontalmente en contra de SOPA. Compañías como Google, Facebook, Mozilla, Twitter, Yahoo!, Tumblr, Reddit, AOL, Wikimedia o LinkedIn, entre otras, han criticado sonoramente el proyecto de ley. De hecho, algunas de ellas llegaron a publicar un anuncio a página entera en la edición del New York Times del miércoles 16 de noviembre advirtiendo de los peligros que esconde SOPA.
Y es que utilizar métodos como los que pretende usar SOPA para combatir el intercambio de archivos en Internet es como matar moscas a cañonazos: sí, consigues eliminar la mosca, pero con ella también te llevas por delante todo lo que hay a su alrededor. Leyes como en Estados Unidos SOPA, o en España la ley Sinde, sólo consiguen aumentar la inseguridad jurídica de la red, lo que lleva a la autocensura y a cortar las alas a un sector empresarial que tiene que andar de puntillas por el que es su hábitat natural de negocio.
Si lo que se quiere es acabar con la piratería, es de sentido común que lo primero es ofrecer opciones de consumo digital viables, lo cual casi no existe en España, y lo segundo es cambiar el chip de la industria cultural y del entretenimiento. Porque no puede ser que las grandes empresas del ocio se quejen de la piratería y, a su vez, sus jefazos reciban aumentos anuales del 150%.
Vía | Cult of Mac Foto | Marc Falardeau