Bradley Manning está acusado de ayudar al enemigo. Pero ayer la juez militar Denise Lind tuvo que concretar en respuesta una pregunta de la defensa del soldado, que decía: "¿Quién es el enemigo?", señoría.
La respuesta es "Al Qaeda en la Península Arábiga", dijo la juez. Probablemente se quedó tan ancha como debía ser la "maleta" en la que los agentes de la DEA destinados en la capital de los Emiratos Árabes Unidos descubrieron que un ex vicepresidente de Afganistán llevaba 52 millones de dólares en efectivo en un viaje que realizó a Dubai.
El cable desclasificado por WikiLeaks y enviado a Washington desde la embajada de Kabul señala que al político se le permitió quedarse con el dinero con la condición de no revelar su origen o destino. Dubai, nuevo Chicago del desierto, se ha convertido en sinónimo de lavadora de negocios sucios desde que los poderosos de Afganistán lavan allí el dinero. Sobre el caso no hay investigación abierta. No hay juez civil o militar que pregunte.
Alguien está ayudando al enemigo y no es Manning.
Foto | savebradley (flickr)