Esta sencilla herramienta para acortar URLs cuenta con una opción para registrar la ubicación GPS
Debemos estar alerta ante cualquier enlace sospechoso que nos envíen
Nada nos garantiza la privacidad en Internet. Al utilizar nuestros dispositivos móviles o PC conectados, estamos dándole la bienvenida a nuestro hogar tanto a compañías de terceros como a ciberatacantes que quieran vulnerar nuestra privacidad. Siento ser así de frío, pero lo cierto es que es así. El grado de privacidad que tengamos depende de nosotros y nuestros hábitos en la red.
Que alguien pueda conocer nuestra ubicación es algo que está al alcance de más personas de las que crees. Y si todavía estás dudando de ello, en este artículo te vamos a mostrar un ejemplo de por qué no deberías abrir ningún enlace que creas sospechoso, ni siquiera de tus propios contactos de WhatsApp. La prueba de ello se llama IP Logger.
Una imagen inofensiva puede ser la causa de que reveles tu ubicación
Técnicamente, IP Logger tan solo se trata de un acortador de URLs con algunas funciones avanzadas. Sin embargo, dispone de una opción para registrar la ubicación GPS de cualquiera que abra el enlace que hemos acortado.
De esta manera, si alguien copia la dirección de una imagen totalmente inofensiva, acorta su URL por medio de IP Logger y envía este nuevo enlace a alguien con la opción de la ubicación activa, es posible obtener la ubicación exacta de una persona. Definitivamente se trata de una herramienta que debería ser ilegal.
El proceso ni siquiera requiere de conocimientos técnicos. El usuario únicamente tendrá que copiar la dirección de la imagen que quiere enviar a la víctima y pegarla en IP Logger para acortar la URL. Tras ello activa la opción ‘Recopilar datos GPS’ y el enlace que devuelva IP Logger será al que la víctima tendrá que entrar para revelar su ubicación.
Lo más sorprendente de todo es que la herramienta revelará la ubicación exacta del dispositivo en el que se haya presionado el enlace. Si tu dispositivo móvil tiene opciones de seguridad activadas por defecto para preguntarte siempre que se accede a la ubicación, lo hará si presionas este tipo de enlaces (al menos la primera vez), por lo que ahí tendremos una capa adicional de seguridad.
La URL que devuelve IP Logger es bastante sospechosa de por sí como para pensar que alguien te ha enviado una imagen. Sin embargo, la herramienta también permite modificar la URL, pudiendo añadir la extensión final del archivo y haciendo que esta práctica levante aún menos sospechas.
Además de ello, si el atacante genera un dominio aparentemente inofensivo y lo redirecciona a la URL de IP Logger, el resultado sería aún más problemático, pues el enlace podría pasar desapercibido para mucha gente, revelando la ubicación exacta de forma sencilla.
Ten cuidado con los enlaces que abras
Este es uno de los múltiples ejemplos que nos muestran por qué no debemos abrir cualquier enlace que nos envían a la ligera. Nuestra recomendación es tener siempre activados los mecanismos que nos avisan de cuándo están utilizando nuestra ubicación en dispositivos móviles y ordenadores, e ir siempre con pies de plomo en lo que respecta a abrir enlaces en servicios de mensajería, SMS, e-mail, etc.
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